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16 de marzo de 2023ROOTECO/David Villagrá
“La agricultura sí puede y debe ser sostenible y rentable al mismo tiempo”
David Villagrá es CEO de Rooteco, startup que fundó en 2019 junto con Jaime Olaizola y Sandra González. La pandemia provocada por el Covid-19 ralentizó el desarrollo del producto, que culminó en 2022. Ahora, Rooteco ha lanzado sus productos biofertilizantes y bioestimulantes al mercado español con la misión de mejorar la productividad y rendimiento agrícola de una forma sostenible con el medio ambiente. Y con certificación ecológica de Sohiscert.
-¿Con qué certificación cuentan sus productos y cuáles son sus clientes? https://sohiscert.com/ Nuestros clientes a día de hoy son agricultores de la zona de Castilla y León y estamos empezando a trabajar con distribuidores de toda España.
-¿La alta inflación es un peligro para el crecimiento en hectáreas y fincas de producción ecológica? -Creemos que se puede producir una ralentización después de una década de continuo crecimiento, ya que la subida de precios y la caída del consumo influye en los productos orgánicos, pero no se detendrá el crecimiento. Simplemente, será un crecimiento más lento.
-¿España está en lo más alto del ránking europeo y mundial en producción ecológica? -España es uno de los principales productores por superficie de la Unión Europea y del mundo de agricultura ecológica. La superficie destinada a la producción ecológica en España aumentó el 8% en 2021 frente al año anterior, hasta alcanzar las 2.635.442 hectáreas, y supone un 10,79 % de la superficie total agrícola. Estos datos confirman la tendencia de crecimiento de los últimos años, y colocan a España como uno de los principales productores ecológicos por superficie de la Unión Europea y del mundo.
-¿Cómo ves el sector ecológico en España en la actualidad? -Creemos que el sector ecológico en España está sano y en crecimiento, aunque puede que se ralentice ese crecimiento por la coyuntura económica actual, como ya hemos dicho. En sólo 8 años ha crecido un 50% la superficie agrícola ecológica en Europa, siendo Alemania y Francia los países que más consumo realizan de este tipo de cultivos. Y es que no hay más que ver el número de operadores que había en cultivo ecológico en 1991, que eran 396, y en 2021, que son casi 60.000 operadores. Y sigue creciendo en la actualidad el número de ellos.
Equipo fundador de Rooteco
SOSTENIBILIDAD
-Tenemos que transitar rápidamente hasta un sistema agroalimentario completamente sostenible… Pero sostenible de verdad…
-La agricultura sí puede y debe ser sostenible y rentable al mismo tiempo. La sociedad está cada vez más sensibilizada con la sostenibilidad y con la calidad en su forma de alimentarse. Antiguamente era suficiente con comer; ahora nos preocupamos también por tener una buena comida y por cómo nos llega esa comida, tanto medioambientalmente como en el respeto de los derechos laborales. Por eso, la mejor manera de afrontar estos retos es ayudar al agricultor a que pueda avanzar hacia ese modelo más sostenible, agroecológico, también bajo parámetros de rentabilidad y generación de empleo. No olvidemos que el sector agrícola convencional da trabajo a más de 750.000 personas sólo en España. Y el sector agroecológico no se queda cojo. No para de subir.
-¿Actualmente, crees que se lleva a cabo una agricultura sostenible con el medio ambiente o es un sector que tiene mucho trabajo por delante en este sentido?
-En la actualidad, la agricultura se enfrenta a un reto sin precedentes: ¿Cómo suministrar alimentos a los 9.000 millones de personas que poblarán el planeta Tierra para el año 2050? Esto supone producir un 60% más de lo que se hace en la actualidad. Todo un desafío si además tenemos en cuenta factores como el cambio climático. Pues bien, la agricultura moderna se enfoca en responder a esta demanda. Para ello puede emplear tecnología e innovaciones sostenibles destinadas a reducir y optimizar el uso de los recursos naturales.
AGRICULTURA INDUSTRIAL
-¿Cómo impactan en el medio ambiente las prácticas agrícolas no sostenibles?
-Los efectos adversos de los fertilizantes químicos se deben principalmente al uso excesivo e ineficiente que se hace de ellos, que provoca pérdidas de nutrientes en el medio ambiente y otras consecuencias negativas, como la contaminación del agua potable y la eutrofización de los sistemas de agua dulce y las zonas costeras. Las prácticas agrícolas inapropiadas también conducen al empobrecimiento del suelo y de la vegetación. Este empobrecimiento supone una pérdida de rentabilidad para la explotación, acelerada por el hecho de que la agricultura es cada vez menos rentable en ciertas áreas, lo que puede conducir al abandono de la tierra. Cuando las explotaciones son abandonadas no suelen recuperar el estado previo, sino que sufren rápidos procesos de erosión y degradación. Unas prácticas agrícolas inapropiadas impactan en el ambiente debido al uso intensivo de agroquímicos, la contaminación del agua y la aparición de zonas muertas, la degradación del suelo, la producción de desechos y la contaminación genética.
SECTOR AGRO
-¿Qué prácticas agrícolas se deben de llevar a cabo para ser sostenibles?
-La innovación es el mejor aliado de la agricultura del siglo XXI. Es fundamental apostar por políticas de I+D en general, pero en particular lo es en el sector agro. En Rooteco estamos convencidos de que en la próxima década va a haber una revolución en la forma en la que se hace agricultura en el mundo. Hay muchos microorganismos que van a cambiarlo todo. La respuesta está ahí, en la Naturaleza, sólo tenemos que encontrarla. Se puede conseguir una mayor cantidad de cosecha utilizando el mínimo de recurso de suelo y agua; o disminuir el uso de nitrógeno incrementando la toma natural por parte de las plantas. Estos son retos a los que ya hemos dado respuesta gracias a bioestimulantes y biofertilizantes como los productos derivados de nuestro hongo formador de micorrizas que, entre sus muchos beneficios, contribuye a mejorar las propiedades del suelo y aumenta la tolerancia de las plantas a la sequía. Existen diversos productos de origen biológico que contribuyen al control de las plagas, bien sea por fomentar el crecimiento de la planta, mejorar su sistema inmune o combatir directamente los insectos y otros organismos que afectan al cultivo. Los bioestimulantes, sustancias de origen biológico, promueven el crecimiento y desarrollo de las plantas, además de mejorar su metabolismo. Esto último hace que las plantas sean más resistentes ante condiciones adversas, como por ejemplo la sequía o las plagas. También de origen biológico, los biopesticidas son empleados principalmente para el control de plagas en la agricultura. Los bioelicitores estimulan el metabolismo secundario de las plantas, que está íntimamente relacionado con la protección del cultivo y la productividad.
-¿Cómo incentivar las prácticas sostenibles en el sector agrícola?
-Se identifican tres estrategias sobre cómo podemos fortalecer esta agricultura que es realmente sostenible:
a) Primero se deberán reorientar las políticas agrícolas existentes para alentar a los/as pequeños/as agricultores/as a adoptar una agricultura sostenible. Los gobiernos deberían rediseñar sus subsidios y programas de extensión agrícola para enfocarse en los agricultores/as familiares y de pequeña escala e incluir programas educativos, tecnologías, incentivos y otras herramientas necesarias para la transición hacia una agricultura verdaderamente sostenible. Este cambio es caro y requiere una inversión grande. Es particularmente importante explorar la implementación de financiación desde diferentes fuentes.
b) En segundo lugar, se deberán diseñar nuevas políticas para apoyar la transición hacia una agricultura ecológica promoviendo el desarrollo de estrategias nacionales y regionales para apoyar sistemas alimentarios sostenibles, incluidas políticas públicas que promuevan la agricultura sostenible.
c) El último es que se deben fomentar más investigaciones en la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación y las organizaciones de investigación mundiales para conocer los impactos socioeconómicos y ambientales de la agricultura ecológica y poder difundir buenas prácticas que la fortalezcan.
P. Bolaño