Carlos Fresneda es un viejo amigo muy querido, un periodista de vocación y de profesión y un ecoactivista infatigable. Estará en BioCultura BCN presentando su último libro, un homenaje a Joan Carulla. Aquí, Pedro Burruezo le entrevista y Carlos desmenuza su pasión y su devoción por este ecohéroe tan particular que, en su día, supo darle la espalda al signo de los tiempos para construir ecotopías que le plantaran cara a las distopías que ya están aquí. La cita es en la sala 2, el domingo 7 de mayo, a las 12h. Joan Carulla estará presente.

-¿Quién es Joan Carulla y por qué es el protagonista de tu último libro?
-Joan Carulla es el auténtico pionero de los tejados verdes, el ecologista centenario.  Desde hace medio sigo cultiva en su azotea de 150 metros cuadrados, en el barrio de Guinardó, un vergel con 40 árboles frutales e hileras de patatas, cebollas, ajos, puerros, tomates, pimientos, habas, berenjenas. Fue capaz de "trasplantar" su parcelita en Juneda (Lleida) al corazón de Barcelona, y marcar de paso el camino de las ciudades verdes ante el cambio climático. Fue un adelantado a su tiempo y es además el filósofo de las plantas, con las que tiene una relación casi simbiótica.
 
LA INTUICIÓN
-¿Cómo lo hace este hombre para cultivar tantas plantas y tantos árboles en su azotea de Barcelona a sus 100 años?
-Por pura intuición y por su experiencia en el campo con su padre, ha sido precursor de la permacultura urbana. Él mismo logró construir a lo largo de 14 años, con cuadrillas de albañiles de su propio pueblo, un edificio de cuatro plantas diseñado para soportar el peso de hasta 70 toneladas de tierra… que le trajeron de un desmonte cercano. La capa de tierra de 25 centíemtros la alimentó con la basura orgánica de su propia tienda de ultramarinos (fue también pionero de la era de los supermercados). Y se las ideó para reforzarlo todo con doble capa asfáltica y un sistema de drenaje. Y también tiene depósito para captar agua de la lluvia, uno de hasta 9.500 litros. Le ha dedicado mucho amor y mucho tiempo a su "parcelita", y ahora le ayuda su hijo Toni, que vive cerca y pasa con él varia horas todos los días. Él se sienta en la azotea y va dando instrucciones. Durante años presumía de la agricultura como "la mejor gimnasia posible: te agachas por aquí, te agachas por allá…".

UN EJEMPLO
-¿Joan Carulla es un ejemplo viviente de que podemos hacer mucho más de lo que hacemos para combatir los principales problemas a los que se enfrenta la Humanidad?
-Carulla ha sido un activista toda su vida: fue naturista o "ecologista sin saberlo", pacifista después de la Guerra Civil (que le pasó por encima), miembro activo del Club de Amigos de la Unesco... Todo esto contra la corriente y en las postrimerías del franquismo. Fue también corredor de comercio en bicicleta -"mi novia metálica"- y nunca tuvo coche. Lleva siendo vegetariano desde la posguerra "por necesidad y convicción". Critica duramente el consumismo desaforado, las guerras crónicas y la falta de rumbo de este mundo, que le empieza a recordar tristemente a lo peor del siglo pasado. Reivindica la "fraternidad" como el valor más importante y olvidado. Tiene nueve bisnietos y le preocupa enormemente el futuro que les espera.

¿UN CASO AISLADO?
-¿Hay muchos hombres y mujeres como él en el planeta o es un caso verdaderamente excepcional? ¿Cuál es tu opinión al respecto?
-Hay pocos como él. Tiene una madera especial por todo lo que le tocó vivir (estuvo refugiado en el campo durante un año, huyendo de los bombardeos de los aviones italianos y alemanes durante la Guerra Civil). Para mí encarna el espíritu de autosuperación y hasta dónde se puede llegar siendo autodidacta. Él quería haber sido médico, pero la miseria agarró por el cuello a su familia y no pudo estudiar. Por eso le gusta tanto repetir la máxima de Hipócrates: "Que el alimento sea tu medicina"... Llegó lo más lejos posible como emprendedor, fue presidente del Gremio de la Alimentación. En el boletín del gremio dio rienda suelta a su faceta de periodista y pensador, con una columna visionaria que llamó "Espigando", y que hablaba de cosas como "la anticipación social" o "el sentido universal del bien de la economía". Su ambición desde niño era convertirse en "generador de amor". Es una persona única, un "ecohéroe" muy singular…

TEJADOS VERDES
-Además de la autoproducción de alimentos, ¿qué otras virtudes tienen las terrazas verdes o huertos urbanos en azoteas? ¿En qué medida aíslan del frío y/o de la calor al piso que se encuentra inmediatamente debajo?
-Todo lo que produce Joan es para el autoconsumo: lo que sobra lo reparte a la familia o a los amigos. Los tejados verdes son una de soluciones para mitigar los efectos del cambio climático. Contribuyen a evitar el efecto de "isla de calor" en las ciudades, donde el asfalto y la falta de vegetación hacen que las temperaturas puedan ser dos o tres grados más altas. En invierno procuran aislamiento. Los sistemas de captación de lluvia son también una medida efectiva de reaprovechamiento del agua.

UN HOMENAJE ESPERADO
-¿La presentación en BioCultura BCN de tu libro va a ser, también, el homenaje que Joan Carulla se merecía desde hacía tanto tiempo por haber sido pionero y luchador de tantas batallas?
-Joan Carulla cumple 100 años el 26 de mayo del 2023. Aunque ha aparecido en decenas de artículos y varios documentales, creo que no es suficientemente conocido ni siquiera en Barcelona. La asociación Replantem le distinguió el año pasado con el primer premio Joan Carulla "por su con su contribución a la agricultura urbana". Pero creo que Barcelona no conoce suficientemente la labor de este payés universal. Ha llegado finalmente su momento y espero que con este libro le llegue finalmente el reconocimiento que tanto se merece.

Pedro Burruezo

TOMA NOTA
CARLOS FRESNEDA/JOAN CARULLA EN BIOCULTURA BCN

Domingo 7 de mayo/Sala 2 a las 12h.

PARA SABER MÁS DE JOAN CARULLA
Joan Carulla (Juneda, 1923) y Carlos Fresneda (Madrid, 1963) cruzaron sus caminos hace algo más de una década. Carulla fue uno de los protagonistas de "Ecohéroes", en el que apareció como "el abuelo de los tejados verdes". Con el siglo a la vuelta de la esquina, Fresneda creyó llegado el momento de glosar su apasionante vida como ecologista, pacifista, pensador y emprendedor. Carulla escribió a lo largo de su vida cientos de páginas con sus experiencias e inquietudes sociales, a las que añadió sus "virutas de la memoria" con la ayuda de su vieja Olivetti. Fresneda le ayudó a separar "el grano de la paja" hasta llegar a los 100 capítulos. Carulla sigue "respirando y pedurando" con sus queridas plantas en su azotea en Barcelona. Fresneda trabaja como corresponsal de El Mundo en Londres y es también autor de "Querido hijo", "La vida simple", "El Rey de las alcantarillas" y "Mirar Madrid".