El sector de la restauración colectiva escolar, según ha informado Efeagro, ha experimentado un proceso de privatización y concentración que ha llevado a que en la actualidad el 58% del mercado de los comedores esté en manos de sólo cuatro empresas, según un informe presentado recientemente por el sindicato CC.OO. Es muy difícil así que se produzca una transición rápida en la mayoría de comedores escolares hacia la alimentación ecológica y local.
Las cuatro empresas son: Serunion, Compass Group, Aramark y Ausolan. Estas firmas se reparten anualmente una facturación de unos 630 millones de euros. El informe de CC.OO. señala que “este proceso de oligopolización ha derivado a veces en una pérdida de la calidad alimentaria en los menús escolares”. Se consumen productos que están lejos, en más de una ocasión, del ideal de la transición hacia la ecología del que hablan los políticos.
MÁS PRECIO QUE CALIDAD
Según CC.OO., esto es visible en el hecho de que en los procesos de licitación “normalmente ha primado el precio sobre la calidad del producto, además de la capacidad logística y de compra de las materias primas”. Otra consecuencia de este proceso de concentración es, de acuerdo a la exposición que hace CC.OO., que la mayor parte de los comedores escolares son ya de gestión indirecta (81%), sólo un tercio dispone de cocinas propias (36% de las nueve comunidades autónomas que proporcionado datos para este estudio) y sólo el 32% de los centros que disponen de cocina hacen uso de la misma.
ANTES ERA DIFERENTE
“Anteriormente la mayoría de los comedores escolares estaban gestionados directamente por los propios centros educativos, con personal propio o externalizado a pequeñas empresas del entorno más cercano, al igual que los proveedores de las mismas, garantizando con ello el consumo de productos frescos de proximidad y una mejor calidad en la alimentación de los escolares”, ha señalado CC.OO. en su informe. Esto era positivo para la calidad de los menús y , en general, la calidad organoléptica y nutricional. En lo que respecta al precio, el documento indica que entre el pasado curso 2022/23 y el actual 2023/24 la casi totalidad de comunidades autónomas han incrementado el precio diario del menú en los comedores escolares “con el fin de satisfacer las demandas de las empresas suministradoras”. Las subidas de estos últimos dos cursos han dejado el precio medio nacional del menú diario en 5 euros, lo que supone un incremento del 8 % respecto al indicador anterior.
SIN BECAS
De esta forma, el precio medio mensual para el alumnado usuario es de 110 euros en la enseñanza pública y asciende hasta los 150 euros en los centros privados-concertados, donde no se establece un precio de referencia, como sucede en los centros públicos. A su vez, CC.OO. ha resaltado que en el curso pasado al 45,6% de los solicitantes se les denegó la ayuda o la beca, al superar los ingresos máximos requeridos porque “el umbral económico para pedir las becas comedor es tan bajo que en la mitad de los casos las familias que las solicitan se quedan sin ellas”. Es decir… que vamos de mal en peor. Mientras, algunos centros representan una excepción a esta tendencia, y los menús son cada vez más ecológicos, sanos y locales. Pero para ello hay que batallar contra viento y marea y no siempre los responsables tienen ni la fuerza ni las ganas para ello. Pero, en cualquier caso, si dejamos el asunto al albedrío del mercado y de los políticos, ya sabemos lo que nos espera. Probablemente, esta tendencia que señala el informe de CC.OO. se acentuará en los próximos años. Como está ocurriendo en otros ámbitos. La sanidad es otro ejemplo.
Antonio Sánchez