Elon Musk quiere producir verduras en Marte. Va a dedicar una gran inversión a esa investigación. Mientras, en la Tierra millones y millones de personas pasan hambre y mueren por desnutrición. Pablo Bolaño reflexiona sobre el asunto…

La falta de amor es la mayor pobreza del ser humano
Madre Teresa de Calcuta

El mundo se ha vuelto irremediablemente loco. Vamos hacia un desastre colosal. Estamos gobernados por cafres beligerantes. Hemos leído en diariodegastronomia.com: “La Asociación de Productores-Exportadores de Frutas y Hortalizas de la Región de Murcia (Proexport) ha anunciado una colaboración estratégica con SpaceX, la empresa con sede en California que preside Elon Musk y que está revolucionando la fabricación de cohetes y los servicios de transporte espacial”. ¿Vamos a producir hortalizas en Marte? Es demencial…

54,6 MILLONES DE KMS
La distancia mínima de la Tierra a Marte es de unos 54,6 millones de kilómetros. Según estiman desde SpaceX, una nave tripulada podría tardar entre 150 y 300 días en llegar a Marte y una aeronave reutilizable podría aterrizar dentro de unos cuatro años, con todos los factores a su favor, si bien depende de las fases de los planetas, del impulso de la nave, de su peso o el combustible que lleve. Por ello, dicen desde SpaceX, “la alimentación de la tripulación de astronautas en el viaje de ida y vuelta, y muy especialmente durante su permanencia en suelo marciano, dependerá de poder cultivar allí de forma permanente. Pero hasta el momento se pensaba que cultivar y recolectar hortalizas en Marte era poco menos que imposible, debido a que las temperaturas diurnas se acercan a las de invierno en la Tierra y pueden llegar hasta los 0℃, mientras que por la noche la delgada atmósfera de este planeta no puede mantener el calor del Sol, de modo que las temperaturas bajan hasta alrededor de los -129℃”. Sin embargo, parece que se ha cambiado en los planteamientos…

LA COLABORACIÓN
“Estamos muy entusiasmados con esta colaboración. Las condiciones extremas de aridez de suelos y sequía perenne, junto con las elevadas restricciones en el uso de fertilizantes y fitosanitarios a que se enfrentan nuestros agricultores en el sureste de España, convencieron a Elon Musk y a nuestros colegas de SpaceX de que somos los más indicados para abordar el reto increíble de producir en un futuro lechugas, brócolis, tomates o pimientos en Marte”, explica Fernando Gómez, director general de Proexport. Por su parte, desde la compañía espacial californiana comentan: “Esperamos que este proyecto no sólo aporte conocimientos cruciales para el éxito de nuestras futuras misiones espaciales, sino que también promueva la investigación científica en la agricultura de precisión y encuentre soluciones a los efectos del cambio climático en la producción hortofrutícola”.

EL PROYECTO
El proyecto “busca desarrollar técnicas sostenibles y eficientes para la producción de alimentos frescos en las duras condiciones de Marte, abordando los desafíos que presenta la agricultura en este planeta, desde la composición del suelo hasta la disponibilidad de agua, oxígeno y la radiación solar. Expertos en agronomía y en tecnología espacial de España y de Estados Unidos se sumarán al equipo de trabajo, que contará con lo mejor de la experiencia local e internacional”, aseguran sus responsables. Nos parece muy bien por los agricultores murcianos. Esperemos que puedan sacar algún beneficio de todo este asunto, que todo redunde en un camino hacia la sostenibilidad, que se hagan bien las cosas y que, en el futuro, pase lo que pase en Marte, toda la agricultura murciana sea ecológica. Pero no estaría mal ser un poco realistas… ¿Nos estamos preocupando de alimentar a un reducido grupo de astronautas, en misiones espaciales encabezadas por un lunático (nunca mejor dicho), cuando en nuestro planeta tantos millones de personas padecen hambre y miseria? ¿Cuántos millones se van a dedicar a esa investigación? ¿No sería mejor dedicarlos a producir alimentos para que puedan comer los más hambrientos? Mientras el mundo esté en las manos de personajes como Musk, el planeta corre un serio peligro.

Pablo Bolaño