Los murciélagos tienen un importante papel en el control de las plagas agroforestales. Es lo que se ha concluido en un nuevo estudio de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y la Estación Biológica de Doñana–CSIC, en el que han analizado la dieta de una colonia de murciélagos de cueva (Miniopterus schreibersii) que se refugia en una cavidad en la Sierra de San Cristóbal, en el Puerto de Santa María (Cádiz). Este tipo de hallazgos corroboran las técnicas de la agricultura buiológica, que busca el equilibrio natural en los cultivos para que sea la propia biodiversidad de la finca la que se encargue de luchar contra las plagas.
Miniopterus schreibersii es el murciélago cavernícola más gregario de Europa y llega a formar colonias de hasta algunas decenas de miles de individuos. Además, es una especie con una importante capacidad de vuelo y su área de campeo puede extenderse hasta más de 30 km del refugio. La colonia de San Cristóbal en concreto, a lo largo del periodo de estudio, contó con entre 3.000 y algo más de 7.000 individuos. Se sabe que esta colonia llega a cazar al menos con cierta frecuencia hasta la mitad sur del Parque Nacional de Doñana.
UNA COLONIA DE GRAN TAMAÑO
“Esta colonia de gran tamaño puede existir y mantenerse en una zona tan humanizada por las características de la especie, que es cazadora aérea de espacios abiertos”, señala Carlos Ibáñez, investigador de la Estación Biológica de Doñana. “Esto significa que no depende del tipo de sustrato vegetal y además cuenta con gran capacidad de desplazamiento”, insiste el experto.
CULTIVOS AGRÍCOLAS
Según Ibáñez, “aunque el medio está muy humanizado, es heterogéneo y ofrece suficientes recursos alternativos a lo largo del tiempo”. Un 70% del espacio son cultivos agrícolas. El resto lo forman manchas de vegetación natural incluyendo espacios protegidos, como el Parque Natural Bahía de Cádiz y la zona sur del Parque Nacional de Doñana.
ARTRÓPODOS QUE SON PLAGAS
El estudio se ha basado en el análisis por metabarcoding del ADN de los restos de las presas en muestras fecales de los murciélagos. Como resultado, el equipo científico identificó algo más de 160 especies de artrópodos en la dieta de estos murciélagos, de las cuales 39 eran identificadas como especies plaga. El grueso de su alimento, pues, está compuesto por 24 especies, de las cuales 11 eran especies plaga, mayoritariamente polillas, que, en el estado de orugas, afectan a diferentes cultivos y masas forestales (pinares y encinares o alcornocales). También se encontraban, entre estas especies, la chinche verde que afecta al algodón y a un buen número de especies hortofrutícolas.
En la dieta de estos murciélagos se detectaron, además, dos presas que son vectores de patógenos. Una de ellas es el mosquito común, Culex pipiens, que es vector entre otros del virus de la fiebre del Nilo, con casos de afección a humanos en la zona. La segunda es la cigarrilla, Neophilaenus campestris, que es vector de la bacteria fitopatógena Xylella fastidiosa, que está considerada como una grave amenaza global para la agricultura en Europa.
UN RESUMEN
En total, entre el 11 de mayo y el 10 de octubre, la colonia había consumido un total de 1.610 kg de insectos plaga. Más del 90% corresponden a 10 especies. Para hacerse una idea de lo que suponían estas cifras, el equipo se centró en el caso concreto de la procesionaria (Thaumetopoea pityocampa), una plaga conocida típica de los pinares. Los murciélagos son un gran activo contra ese especie.
COLONIA PROTEGIDA
Esta colonia está legalmente protegida. M. schreibersii es una especie vulnerable (CEEA) y el refugio está en la Red Natura 2000 como ZEC (ES120030 Cuevas de la Mujer y de las Colmenas). “Sin embargo, esto no asegura su conservación a largo plazo”, afirma el investigador Carlos Ibáñez. “Entre las amenazas están el posible cambio de uso del enclave, la protección de las cavidades donde pasa el invierno, como los complejos Hundidero-Gato y Motillas, con creciente presión de actividades de turismo activo en su interior y el elevado número de parques eólicos en su área vital”.
Redacción/Agencia Sinc